A partir de este nuevo ciclo escolar 2016-2017 se han propuesto algunas modificaciones a la curricula que conllevan grandes cambios en la forma en que se forma a nuestros niños, y esto se puede ver en la nueva organización curricular que ha planteado la Secretaría de Educación Pública en el país.
Desde el 2014, y dentro de las modificaciones que se han planeado en la Reforma Educativa, la SEP ha convocado a maestros, padres de familia, investigadores, alumnos y otros actores importantes para buscar alternativas que garanticen la calidad de la educación.
Existe un reto en el nuevo modelo y es que se pretende educar para las exigencias de este siglo XXI lo que implica que nuestros niños aprendan a leer, escribir, interpretar, manejar equipos de cómputo, internet y que puedan leer y entender el idioma inglés en un porcentaje determinado que les permita abrirse camino a los nuevos aprendizajes.
El nuevo enfoque pretende formar estudiantes que analicen, reflexionen, resuelvan problemas diversos de la vida cotidiana, que aprendan a manejar sus emociones y se puedan desarrollar de una manera óptima dentro de su contexto.
Es importante que como maestros y padres de familia se fomente en nuestros niños los valores como la tolerancia, el respeto, la convivencia, además de conocer las diversas culturas que existen y cómo intervienen en nuestra vida diaria.
El trabajo colaborativo es una de las estrategias que se plantearán primeramente en el aula para llevarlas a cabo en la convivencia con sus compañeros y posteriormente integrarlas en la vida diaria en la convivencia con los demás dentro de su entorno social.
Todo esto tiene una visión que ofrece la ciencia cognitiva moderna la cual se deriva de los siguientes principios pedagógicos:
- Enfocarse en el proceso de aprendizaje;
- TEner en cuenta los saberes previos de los niños.
Educamos para transformar a nuestros niños y crear una sociedad conciente y participativa.